El obturador electrónico. Cuándo usarlo y cuándo no.

El obturador

Conocemos por obturador el mecanismo de cierre o shutter en inglés que permite o impide el paso de luz al sensor.

Tradicionalmente el mecanismo de obturación era puramente mecánico, como el de la réflex E30 de la imagen superior, es decir, un sistema de cortinillas que se desplazan delante del sensor dejando pasar la luz durante un tiempo establecido, el tiempo de exposición, velocidad de exposición/obturación o shutter speed en inglés.

Este es uno de los parámetros esenciales en fotografía, formando el triángulo de la exposición, junto a la apertura y la sensibilidad ISO.

El obturador electrónico y cómo activarlo

Obturador electrónico significa que el tiempo que el sensor se expone a la luz no está controlado por ningún mecanismo, sino que el procesador va leyendo fila a fila los píxeles y los va pasando a la memoria de la cámara, es decir, no se leen todos a la vez, sino que se hace secuencialmente. Hacerlo todo a la vez es el siguiente desarrollo en el futuro de los sensores, lo que se denomina obturador global o global shutter.

En nuestras Olympus podemos activar el obturador electrónico fácilmente desde el Super Panel de Control, en el menú disparo, activando la opción del corazón o modo silencioso. En las EM10 y las PEN (no F) se activa desde la rueda de control en el menú AP.

Ventajas del Obturador Electrónico

El obturador electrónico representa el futuro inmediato de la fotografía, probablemente desplazará por completo al mecánico en un futuro no muy lejano, cuando supere los problemas que ahora presenta y se haya desarrollado el Global Shutter. De momento, podemos disfrutar de sus muchas ventajas (algunas de ellas exclusivas de Olympus):

1. Silencio total: al no existir partes moviéndose no se producen ruidos.
2. Menos vibraciones: aunque el obturador esté muy perfeccionado no deja de producir alguna vibración al activarse.
3. Alta velocidad de disparo en ráfaga: de nuevo Olympus es líder en este apartado con las bestias EM1X y EM1 mkIII con hasta 60 fotogramas por segundo en RAW.
4. Modos de disparo de alta resolución; 50 u 80 Mpx a partir de un sensor de 20 Mpx o 40 Mpx para el sensor de 16 Mpx.

   

   Allure of the Seas en Cádiz
   Fotografía de alta resolución con la EM5 mkII+m-zuiko 12-40 a 12mm
   f2.8, 1/25s ISO 1250
   
   

5. Live ND:  permite simular el efecto de un filtro de densidad neutra, desde ND2 (un paso) hasta ND32 (5 pasos), y comprobar los efectos de la obturación lenta por medio del visor antes de realizar la toma. Esta función elimina la necesidad de cambiar filtros ND ópticos para diferentes escenas y objetivos y es particularmente útil para aquellos objetivos en los que es difícil acoplar filtros. Vídeo de Casanova Foto.
   
   
   
6. Focus Stacking: recomiendo el tuto de photodigiscoping (aunque quiero dedicar una entrada a esta técnica que me encanta en macro). Combinando 8 imágenes juntas, eres capaz de crear una sola imagen que tiene una profundidad de campo mucho mayor. Esta fantástica característica la tienen la EM5 mkII y superiores, en combinación con varias ópticas.
7. Pro Capture: una de las características exclusivas de Olympus en sus modelos superiores. El modo Pro Capture permite empezar a disparar cuando pulsas a medias el disparador, con un buffer que se puede configurar para capturar hasta 35 fotogramas en alta resolución. En el momento en el que el disparador se pulsa hasta abajo, comienza la ráfaga de disparo. De esta manera, ofrece la posibilidad de retroceder en el tiempo, con hasta 35 fotogramas para escoger el momento exacto que querías sin ningún tipo de demora. Perfecto para fauna y deportes. Vídeo de Olympus.
   
   
   
8. Live Composite:Este modo apila automáticamente una secuencia de fotografías tomadas de forma consecutiva en las que la cámara solo añade los aumentos de luz que se producen durante la exposición (esto antes había que hacerlo en Photoshop o similar). La principal ventaja del sistema es que el usuario va viendo en la pantalla LCD cómo se va formando la imagen en tiempo real, por lo que siempre tiene un control absoluto sobre el resultado. Para ello, basta con indicarle a la cámara que tome, por ejemplo, una exposición cada 4 segundos. Después de la primera exposición, las tomas siguientes solo registrarán la luz en las zonas que aumenten de brillo. Esto evita que las zonas cuya luz no cambia, por ejemplo los edificios, salgan sobreexpuestas. En el caso de una circumpolar, por ejemplo, a medida que las estrellas se mueven en el cielo nocturno, la posición de los puntos de luz va variando mientras la cámara los registra y ‘fabrica’ las trazas de estrellas.

Cuándo no usar el Obturador Electrónico

No todo van a ser ventajas, puesto que aún tenemos en obturador de cortinillas y sigue siendo el que usamos por defecto, y es que hay situaciones en que se desaconseja su uso:

1. En situaciones de baja iluminación y usando ISO alto (más de 3200), ya que introduce ruido cromático, difícil de eliminar en post procesado.
2. Fotografiar sujetos en movimiento, pues produce lo que se llama jello effect, distorsionando la imagen, como se ve en la toma.
   
3. Con luz artificial, donde se produce el efecto conocido como banding que aparece en forma de molestas líneas o artefactos de color sólido, con un aspecto algo parecido a lo que podríamos conseguir con un efecto de Posterización.
4. Usando flash, pues la velocidad de sincronización se verá disminuida a 1/60s o 1/120s según modelos.

Cuándo usar el Obturador Electrónico

1. Cuando se requiere silencio total: teatro, conciertos, golf y momentos decisivos en deporte, etc.
2. Cuando necesitas más de 1/8000s (o 1/4000 en la EM10 o PEN), puesto que podremos conseguir hasta 1/32000s (1/16000 en la EM10). Muy útil con objetivos muy luminosos o en retratos con muy buena luz, donde queremos conseguir fondos desenfocados con grandes aperturas.
3. Cuando necesitamos ráfagas de hasta 60 fps, el modo procapture en fotografía deportiva o de aves, por ejemplo.
4. Como medio de prolongar la vida del obturador mecánico (aunque los profesionales de Olympus están garantizados para 400.000 disparos y se sabe que duran más aún).

Hasta la llegada del obturador global aún le queda vida al mecánico, sin embargo, tenemos la suerte de que Olympus ha sabido aprovechar como nadie las ventajas que hoy por hoy ofrece el obturador electrónico.